¿Cómo conservar la frescura de las cebollas y ajos?

La cebolla y el ajo son ingredientes fundamentales en la gastronomía de todo el mundo, otorgándole sabor y aroma a cada plato que se prepara. Sin embargo, su conservación suele ser un obstáculo en la cocina profesional al tener que mantener su frescura para conservar sus propiedades. Desde Comercio de Patatas y Cebollas, te mostramos cómo conservar la frescura de las cebollas y ajos para que los puedas disfrutar en todas tus recetas favoritas.

Aprende a conservar la frescura de las cebollas y ajos

Primero que nada, es importante mencionar que los ajos y las cebollas deben ser almacenados en lugares frescos y oscuros para prolongar su vida útil. También es ideal buscar superficies con buena ventilación para favorecer la circulación de aire y evitar que se generen humedades que puedan derivar en la aparición de moho.

Una buena opción para prolongar la frescura de la cebolla es envolverla en papel de periódico. El papel absorberá la humedad del ambiente y así evitará que se formen hongos o que la cebolla se ablande con el tiempo al perder agua. Por otra parte, las cebollas cortadas pueden ser almacenadas en una bolsa de plástico cerrada colocándola en el refrigerador. Siempre recuerda etiquetar la bolsa con su fecha de almacenamiento para poder tener un mejor control de su caducidad y no utilizarlas una vez que hayan pasado varios días.

En cuanto al ajo, es importante conservarlo con sus papas para evitar que se resequen y pierdan sabor. Las papas también ayudan a evitar que se forme moho durante el almacenamiento. De igual forma, el refrigerador es una buena opción para almacenarlos con sus papas. En este caso, es necesario colocarlos en un recipiente cerrado para evitar que contaminen con su fuerte aroma a otros alimentos.

Otra opción para conservar tanto las cebollas como los ajos es hacerlo a través de la congelación. Puedes pelar todo el ajo y colocar los dientes en una bolsa de plástico para guardarlos en el congelador. Por otra parte, las cebollas pueden ser cortadas finamente y colocadas en un recipiente de plástico y congelarlas. De esta manera, puedes utilizarlos en el futuro sin tener que preocuparte por su estado de conservación.

En todo caso, es importante tener en cuenta que las cebollas y los ajos no deben ser almacenados cerca de frutas y verduras muy aromáticas, tales como manzanas y zanahorias. Además, antes de su uso, se recomienda remojarlos en agua fría para disminuir su aroma y sabor tan fuerte.

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